Escuela europea, principios del s. XIX.

Escuela europea, principios del siglo XIX.
"Ruinas bajo la luz de la luna".
Óleo sobre tela.
Reentelado.
Medidas: 81 x 60 cm.; 90 x 69 cm. (marco).

En los albores del siglo diecinueve, el romanticismo empezaba a declinar. Sin embargo, la fuerza de aquel movimiento nunca se extinguió, de modo que sobre todo a principios de siglo muchos pintores europeos seguían reivindicando el potencial emotivo de las ruinas y de los "caprichos", como era llamado el popular género de la reinvención italiana de la arquitectura grecorromana. El cuadro que nos ocupa se sitúa en un periodo de tránsito, en el que el romanticismo se reinventa a sí mismo extremando sus posibilidades expresivas. La luna llena desprende una luz fría que modela las altas columnas de orden corintio y acentúa el dramatismo de los arcos tapizados de musgo sirviéndose de intensos contrastes lumínicos. Un grupo de personas (las figuras quedan empequeñecidas ante la monumentalidad arquitectónica) han encendido una hoguera, de modo que la luz cálido del fuego ofrece un estudiado contrapunto a la luz argéntea del cielo.

El gusto por los vestigios artísticos del pasado, la generalización de los viajes de escritores y artistas en busca de monumentos y obras de arte que les sirvieran de fuente de inspiración, y el descubrimiento de importantes restos antiguos como los de las ciudades de Pompeya y Herculano contribuyeron sin duda al éxito del género.