Venus en cuclillas después de Antoine Coysevox

Después de ANTOINE COYSEVOX (Lion, 1640-1720), siglo XVIII.
“Venus en cuclillas”.
Bronce.
Medidas: 21 x 9 x 43 cm; 24 cm (altura total con peana).
Esta escultura sigue el modelo de la Venus agazapada realizada por Antoine Coysevox en torno al año 1684-1686, hoy perteneciente a la colección del Louvre, a su vez inspirada en la Venus del siglo III a.C., posiblemente creación del escultor griego Doidalsas de Bitinia. También conocida como “Venus modesta” o “Venus vergonzosa”, Coysevox nos muestra a una Venus recién salida del baño que se repliega sobre sí misma para cubrirse el pubis y el busto, adoptando un gesto grácil. Formalmente se trata de una imagen de gran belleza, gracia y elegancia, basada en el canon escultórico grecolatino. Sin embargo, aunque los rasgos faciales siguen los modelos antiguos, el modelado suave y delicado revela una estética moderna. Destaca asimismo la gran calidad del cincelado, que configura formas fluidas y delicadas, organizando la composición a base de sutiles curvas y contracurvas. Asimismo, se ha trabajado el detalle con gran refinamiento, sin olvidar nunca el referente clásico. La tortuga sobre la que se sienta introduce velados simbolismos.
A juzgar por la cantidad de copias que se han excavado en sitios romanos en Italia y Francia, esta variante de Venus parece haber sido popular desde el inicio de su creación Varios ejemplos de la Venus en cuclillas en colecciones destacadas han influido en los escultores modernos desde Giambologna y han sido dibujados por artistas desde Martin Heemskerck, quien hizo un dibujo de la Venus en cuclillas de Farnese que ahora se encuentra en Nápoles. El modelo a menudo se relaciona con un pasaje corrupto en la Historia natural de Plinio el Viejo, que enumera esculturas en el Templo de Júpiter Estator en el Pórtico de Octavia, cerca del Foro Romano; el texto ha sido modificado para mencionar a Venerem lavantem sese Daedalsas, stantem Polycharmus ("Venus lavándose, de Daedalsas, y de pie, de Polycharmus"), registrando una escultura de una Venus que no estaba de pie. Estas breves referencias archivísticas y tantas versiones antiguas existentes hacen que la identificación archivística de las copias romanas sea insegura.