DESCRIPCIÓN
“SPADINO”; GIOVANNI PAOLO CASTELLI (Roma, 1659 – 1730).
“Bodegón con aves y frutas”.
Óleo sobre lienzo.
Bibliografía: Europ. Art, II. n.6. junio 1991, pg. 57, imagen pg. 59.
Medidas: 92 x 130 cm; 125 x 164 cm (marco).
La combinación de jugosos frutos y aves exóticas fue reiteradamente explorada por Spadino, un pintor en cuyos bodegones singularizan la vertiente más sensualista y exuberante del barroco. La madurez de las frutas ha alcanzado el grado sumo de suculencia (algunas incluso ya empiezan a abrirse, anunciando lo efímero de su esplendor). Las flores también se encuentran en la cúspide de su fragancia, pronta a marchitarse. Al fondo se localizan unos acueductos romanos que conforman el marco perfecto para la composición escenográfica de la naturaleza. Esta cuidada escenografía, netamente barroca, queda realzada por el detenido estudio lumínico, basado en un juego rítmico que alterna sombras vegetales y brillos que atraen la mirada hacia higos y uvas. Se aprecia la herencia flamenca en las logradas calidades nacaradas de las pieles frutales y los carnosos corazones de los melones partidos.
Conocido como “Spadino”, Giovanni Paolo Castelli fue un pintor italiano del periodo barroco, activo principalmente en Roma y especializado en la pintura de naturalezas muertas, principalmente flores y frutas. Procedía de una familia de artistas que tenía como protector a Jan Herinans, un pintor flamenco vinculado a la familia de los Pamphili y especializado en las composiciones florales. Castelli se crió por tanto en contacto directo con los círculos artísticos de la Roma de la época, e inició su formación junto a su hermanos mayor, Bartolomeo Castelli (1641-1686), ya por entonces un conocido pintor de naturalezas muertas. Desde 1674 trabajará como maestro independiente, y tras la muerte de Bartolomeo, en 1686, se hará cargo del taller familiar. El lenguaje de Giovanni Paolo Castelli evidencia además la influencia del flamenco activo en Italia Abraham Brueghel. De hecho, parece ser que entre 1671 y 1674 Castelli amplió su formación en el taller de Brueghel. Castelli pintó principalmente ricas copas y jarrones con flores y frutos, con un estilo personal marcado por una paleta brillante que realza los contornos de los objetos, plasmados con minucioso detalle y atención a las calidades. Su lenguaje evidencia las formas flamencas que posiblemente aprendió de su padrino Herinans, y más tarde también de Brueghel, durante la estancia de éste en Roma antes de su partida definitiva a Nápoles. Su lenguaje será continuado por su hijo, Bartolomeo Spadino (1696-1738). El origen del apodo que heredó su hijo, “Spadino”, es incierto; literalmente significa “el hombre de la espada”, y ya lo ostentaba su padre, al igual que él lo transmitirá a su hijo. Los estudiosos plantean la pregunta de por qué él heredó el apodo y no su hermano mayor, proponiendo como respuesta la forma de su firma, muy angular, como la hoja de un cuchillo. Otros historiadores apuntan que podría deberse a que el pintor utilizase una paleta larga y estrecha, cuya forma recordaría a la de una espada. No obstante, está documentado que Giovanni Paolo fue encarcelado entre 1680 y 1683 por homicidio, lo que podría indicar que habría ganado el apodo al matar a su enemigo en un duelo. Considerado a día de hoy como uno de los pintores de bodegones más importantes de la escuela romana de finales del siglo XVII y principios del XVIII, Giovanni Paolo Castelli está actualmente representado en la Pinacoteca Civica Fortunato Duranti de Montefortino, el Museo de Bellas Artes de Boston, el Fesch de Ajaccio y la Pinacoteca de Rieti, entre otras colecciones.