DESCRIPCIÓN
Escuela flamenca; siglo XVII.
“Santa Cecilia”.
Óleo sobre cobre.
Medidas: 40 x 29 cm; 48 x 37 cm (marco).
En esta imagen de carácter religioso, ya que su protagonista el Santa Cecilia, acompañada por varios angelitos, el artista consigue trasladar al espectador más allá del contenido sacro, brindándole una imagen de carácter sensorial. La escena invita a reflexionar alegóricamente, ya que el artista propone en la misma escena distintas acciones que aluden directamente a los sentidos, como por ejemplo la vista, y el olfato, representado por la vegetación, y el oído a través de la acción de la santa. Este interés por dicha representación recuerda en gran medida a las obras de los cincos sentidos realizadas por el pintor Rubens y Brueghel, que hoy en día se encuentran en el Museo del prado y que al igual que en este caso concreto muestran una composición que destaca por la abundancia y el detallismo preciso de todos los elementos que componen la escena.
Santa Cecilia, la más popular de las mártires romanas junto a santa Inés. Joven patricia de la familia Caecilia, fue forzada por sus padres a contraer matrimonio, si bien en la habitación nupcial ella convirtió a su marido al ideal de la castidad cristiana. El joven esposo se hizo bautizar junto a su hermano, y ambos fueron condenados a muerte. Como Cecilia se negó a ofrecer sacrificios a los dioses, fue condenada a morir ahogada por el vapor de un caldario sobrecalentado, pero un rocío celestial la refrescó. Entonces se ordenó que fuera decapitada, pero su verdugo le asestó tres golpes sin conseguir separar la cabeza del cuerpo. Como la ley romana prohibía seguir golpeando al condenado tras estos tres intentos, Cecilia sobrevivió tres días. Murió en presencia del papa Urbano y fue sepultada en el cementerio de Calixto. Santa Cecilia es, desde el siglo XV, la patrona de los músicos, cantores y organistas, así como de los fabricantes de órganos e instrumentos de cuerda. En su origen santa Cecilia, como la mayoría de las mártires, no llevaba ningún atributo identificativo. Fue a finales del siglo XV, al pasar a ser patrona de los músicos, cuando recibió como atributo un instrumento musical, un órgano portátil o fijo.