DESCRIPCIÓN
FRANCISCO SALAZAR ( Venezuela, 1937- París, 2019).
“Deplacement d´un element inmaterial avec un trou (Nº715)”, 1987.
Acrílico sobre cartón montado a tabla.
Firmado, fechado y titulado al dorso.
Medidas: 102 x 102 x 5 cm.
Obra realizada con acrílico sobre cartón montada a tabla. Para conseguir la composición el artista ha realizado una disección por capas del soporte creando así un juego de formas geométricas, con las que expresa su interés volumétrico por un material bidimensional. Convirtiendo así el acrílico en un elemento escultórico. La obra de Francisco Salazar se caracteriza por un acercamiento al constructivismo geométrico que nunca llega a confundirse con un esquematismo rígido. Incluso en sus volúmenes más voluptuosos, la línea, la luz o la sombra, y a veces, el hueco, marcan un contrapunto geométrico que ordena y recoge la composición y que enriquece sus puntos de vista. A través de un expresivo y logrado juego de volúmenes y líneas, de tonos y texturas, de apoyos y desafíos a la gravedad.
Francisco Salazar inició sus estudios en Arquitectura en la Universidad Central de Venezuela, donde desarrolló un interés por las relaciones espaciales y las formas puras. A finales de los años sesenta, transformó este interés en su propio estilo dentro del Arte Cinético, centrándose en efectos luminosos y ópticos. Su investigación en torno a las rupturas y continuidades en el espacio, y cómo estas afectan la percepción del espectador, lo llevó a elegir el cartón ondulado como material principal. Este material le permitió crear patrones tridimensionales en forma de retículas, que se convirtieron en la base de su trabajo.
Mediante la pintura y los relieves generados al cortar el cartón, Salazar logró efectos visuales que juegan con la luz, dando lugar a dinámicas cinéticas y vibraciones perceptuales. Las interacciones entre sombras, patrones repetitivos y el espacio de exhibición crean movimientos virtuales anclados en la abstracción. Así, el artista buscaba destacar la relación entre los espacios vacíos y llenos. Su preferencia por el monocromatismo surgió de la necesidad de manejar la luz con precisión, para diferenciar y, a la vez, unificar ambos tipos de espacio.
Actualmente sus obras forman parte de relevantes colecciones artistas entre las que destacan; el Museo Nacional de Bellas Artes, Buenos Aires, Argentina, el Museo de Arte Moderno, Medellín, Colombia, Cisneros Fontanals Art Foundation, Florida, USA, el Museo de Arte Moderno de la Ciudad de París, Paris, el Museo de Arte Moderno Jesús Soto, Ciudad Bolívar, Venezuela y el Ateneo de Valencia, Valencia, Venezuela.