Conjunto de diez azulejos sevillanos de finales del siglo XIX, principios del siglo XX.
Fábrica de cerámica de Ramos Rejano.
Cerámica esmaltada.
Medidas: 13 x 27,50 cm.
Azulejos en cerámica esmaltada con decoración polícroma, a base de esmaltes azul, turquesa, ocre, naranja y marrón sobre engobe blanco de estaño.
La fábrica de cerámica Ramos Rejano, ubicada en el barrio de Triana en Sevilla, fue una de las más importantes del siglo XX. Fundada en 1895 por Manuel Ramos Rejano, operó hasta 1965. Ramos Rejano nació en Palma del Río en 1851 y, tras una breve carrera en el comercio, se dedicó a la cerámica, fundando su primera fábrica en Los Remedios y luego trasladándola a la calle. San Jacinto. Su producción se caracterizó por la alta calidad artística, destacando por la técnica de dorado y reflejo metálico. La fábrica ganó prestigiosos premios y contó con reconocidos ceramistas como Alfonso Chaves Tejada. Tras la muerte de Ramos Rejano en 1922, su hijo Manuel Ramos Villegas adquirió la dirección, pero la fábrica cerró en 1965 debido a la crisis.
Los pintores de la fábrica Ramos Rejano destacados incluyen a Manuel Vigil-Escalera y Díaz, Enrique Orce Mármol, Manuel García Bermúdez, Pedro Navia Campos, José Gómez Perea, Manuel Baena Gutiérrez y Juan Oliver Míguez, este último como colaborador externo. También destacan Alfonso Chaves Tejada, quien ingresó en 1925 y fue nombrado maestro de taller en 1938, y Carlos Roquette de la Torre.
Otros pintores de la plantilla fueron Pedro Lobo de la Vallina, Antonio Díaz Ropero, José Colchero Caro, Juan L. Gallego Arillo, José Gutiérrez Rodríguez y Antonio Carrera Acosta, quien colaboró en los años 60. Además, el escultor Francisco Cluny y otro artista. llamado Ceballos también formaron parte del equipo.