Reloj Imperio, a la manera de André-Antoine Ravrio. Francia, c. 1810
Broce dorado y bronce patinado. Esfera de porcelana pintada a mano, esmaltada
Con suspensión del péndulo en hilo de seda
Conserva llave y péndulo
Medidas: 43 x 45 x 13 cm.
Reloj de sobremesa Luis XVI de concepción escultórica y que la esfera del reloj simula ser la rueda del Carro de Ceres. La totalidad del reloj esta realizada en bronce dorado y patinado, con esmalte en la esfera. Sobre una base que se sustenta en varias patas se alza la figura de Ceres, diosa de la agricultura, conduciendo un carro y mostrando un arado tirado por un par de bueyes curtidos, Existe un modelo muy similar en la «Enciclopedia del Reloj Francés, Pierre Kjellberg. dad. 419.»
La calidad de la pieza y la destreza del artesano indica que sigue los modelos de André-Antoine Ravrio (París, 1759-1814) escultor, broncista y dorador. El padre de André-Antoine Ravrio, hábil fundidor, era generalmente estimado por su rectitud y talento, y su madre pertenecía a la familia Riesener, muy conocida por dedicarse a las artes industriales y liberales. En 1777 obtuvo el título de maestro fundidor y en 1790 fundó su propia empresa. Se hizo famoso por suministrar bronces de mobiliario a una clientela prestigiosa, entre la que se encontraba el emperador Napoleón. Fundó un premio de 3.000 francos para el descubrimiento de un medio de prevenir los peligros del uso del mercurio en la profesión de dorador de metales. El erudito Jean-Pierre-Joseph d'Arcet, ganador del premio, extendió los beneficios de sus investigaciones a otras profesiones tan peligrosas para quienes las ejercían como lo había sido hasta entonces la de dorador de bronce.