EMILIO GRAU SALA (Barcelona, 1911 – París, 1975).
"Joven, pájaros y jaula en una terraza abierta al mar de Toulon”, 1939.
Óleo sobre madera.
Firmado y fechado en el margen inferior.
Medidas: 46 x 55 cm; 60 x 70 (marco).
Grau Sala, representante de la vertiente más vitalista de la Escuela de París, despliega en esta vibrante escena un auténtico festín para los sentidos. El universo femenino siempre fascinó al artista, y esa fascinación queda plasmada en escenarios que, a pesar de su familiaridad, se ubican a medio camino entre la realidad y el ensueño. En esta ocasión, una vista de playa desde la terraza de un apartamento se transforma (haciendo uso de una paleta pos-fauve) en un despliegue de texturas y patrones cromáticos que, sin perder la referencia figurativa, la trascienden. Porque Grau Sala no se limita a encerrar las formas en sus límites sinó que la pincelada se desborda en un decorativismo festivo, aunque equilibrado. Una joven cuyo vestido blanco de lino es agitado por la brisa, arremolinando la falda como si fuera una caracola de mar, sostiene en sus manos un pequeño pájaro y lo observa con melancolía. Junto a ella, una jaula de bambú aloja en distintos pisos un buen número de aves tropicales. Los calcetines y las zapatillas colgadas del hilo de tender también flamean por el viento, que a su vez hincha las velas de las embarcaciones que divisamos a lo lejos. El azul del mar, del cielo, de los ojos de la joven, de los trajes de los marineros que se atisban entre las palmeras, de los zapatos colgados y del lazo prendido en el pecho de la muchacha, compite y dialoga con los blancos de los veleros, del vestido, de las nubes limpias, de las rosas blancas, de la mesa con base de hierro forjado... El conjunto se resuelve en un luminismo intenso que crea una atmósfera placentera que arrulla al espectador y estimula su imaginación.
Grau Sala fue un representante destacado de la Escuela de París. Combina su asistencia a la Escuela de Bellas Artes de Barcelona con una formación autodidacta. Forma el grupo “Independents”. Celebró su primera exposición en 1929 en las galerías del famoso marchante Joseph Dalmau y una segunda, ya individual, en la Galerí¬a Brandinas en 1930. Hizo numerosas ilustraciones de libros (Fleurs du mal, Madame Bovary, Bel-Ami, etc.), grabados y escenografías. En 1936, año que se desplaza a París, recibe el premio Carnegie. Comienza a pintar en una etapa expresionista que deriva en un estilo propio de hacer que le irá proporcionando seguridad en sí mismo y creciente fama. Vuelve a la Belle Epoque como inspiración consiguiendo una gran ingenuidad y elegancia artística. Grau Sala pintó en tono intimista. Ha expuesto en innumerables puntos: Madrid (Museo de Arte Moderno), Londres (Galería de Bellas Artes), Buenos Aires (Galería Muller), Nueva York (Galería Dindley), Barcelona (Syra, Rovira, Sala Parés) etc. Obras suyas se encuentran en los Museos de la Villa de París, Museo de l’Ille de France, en el Chateau de Sceaux, Museo de Honfleur, Museo de La Roxhelle, Museo de Barcelona, Museo de Tossa de Mar, Museo de Filadelfia, Museo de Buenos Aires, etc. Su obra se recuperó de manera póstuma, realizándose numerosas antológicas en Barcelona y Madrid.