Escuela española; siglo XX.
Sin título.
Óleo sobre tabla.
Presenta faltas y pérdidas sobre la superficie pictórica.
Medidas: 16 x 27 cm; 35 x 46 cm (marco).
En esta obra el pintor trata de comunicar una reverencia religiosa por el paisaje, la naturaleza en plenitud, libre de los elementos industriales de la vida moderna. De hecho, el propio uso que ha hecho aquí el autor de la luz transmite una atmósfera de ensueño, que invita al espectador a meditar y a contemplarse a sí mismo en el paisaje.