TEODORO JUAN ANDREU SENTAMANS (Alcira, Valencia, 1870 – Valencia, 1934).
“Retrato masculino”, 1905.
Óleo sobre lienzo.
Firmado y fechado en el ángulo inferior derecho.
Medidas: 100 x 121 cm; 115 x 135 cm (marco).
Escena de interior en la que un señor con atavío formal se dispone a escribir una carta en la mesa de su despacho. De éste observamos los estantes llenos de libros con encuadernado de piel. Destaca la captación psicológica que logra Teodoro Andreu, un autor que destacó en el género del retrato.
Teodoro Andreu fue seguidor del luminismo impresionista de Joaquín Sorolla, de quien fue primer discípulo, y logró a la perfección plasma la luz de Valencia en su obra. Su padre falleció cuando él contaba un año de edad, lo que llevó a la familia a trasladarse a Madrid en 1875. En 1884 inicia sus estudios de dibujo y pintura en la escuela El Fomento de las Artes de Madrid, y después pasará a la Especial de Pintura, Escultura y Grabado de San Fernando. Finalizado este periodo, continuará su formación en el estudio de Joaquín Sorolla en Madrid, donde entró en 1889. Posteriormente comenzará a participar en las Exposiciones Nacionales de Bellas Artes, y en 1897 obtuvo tercera medalla por “La paella”. En 1902 deja Madrid para trasladarse a Bilbao, donde abrió su propio estudio y tuvo entre sus discípulos a Bengoa, Medinaveitia, Carlos del Río, José Antonio Arechabala y Rodríguez de Lecea. En estos años viaja al Reino Unido y a Francia, donde conoció el ambiente bohemio del barrio parisino de Montmartre. En 1904 obtuvo por oposición un puesto de profesor en la Escuela Superior de Artes Industriales y Bellas Artes de Cádiz, y posteriormente se instaló en Barcelona. En 1908 fue premiado con medalla de plata en la Exposición Hispano-Francesa de Zaragoza, con el cuadro “La viudeta”, y le fue concedida la condecoración creada para este Centenario del Sitio de Zaragoza. En 1909 obtuvo medalla de oro en la Exposición Regional Valenciana. En octubre de este año regresó a su tierra natal, con plaza en la Escuela de Artes y Oficios de Valencia. En 1910 participa en la Exposición Nacional celebrada en esta ciudad, y obtiene medalla de oro. Por esta época participa asimismo en la Exposición Internacional de Pintura de Buenos Aires, alzándose con medalla de plata. No obstante, en 1914 debe de nuevo abandonar Valencia y se traslada a Santiago de Compostela, donde había sido nombrado profesor de la Escuela de Artes y Oficios. Finaliza esta actividad en 1920 y regresa a Valencia, donde fue nombrado director de la Escuela de Artes y Oficios en 1925. Durante los años veinte participó en diversas exposiciones en Valencia, Madrid y Barcelona, y en 1928 es nombrado miembro de la Real Academia de Bellas Artes de San Carlos, en Valencia. En 1932, por motivos de salud, deja su cargo como director de la Escuela de Artes y Oficios, y al año siguiente celebra su última exposición, en el Círculo de Bellas Artes de Madrid. En los años siguientes a su muerte se le dedicarán muestras en Valencia, Salamanca, Murcia y Alcira. Actualmente está representado en el Museo del Prado (obra en depósito en la Sociedad Económica de Amigos del País de Murcia), el Ayuntamiento de Alcira, el Museo de Magdeburgo (Alemania) y otras colecciones tanto públicas como privadas.