Posiblemente JUAN BAUTISTA DE TOLEDO (Lorca?, 1618-Madrid, 1665); Madrid, segunda mitad del siglo XVII.
“Escena de batalla”.
Óleo sobre lienzo. Reentelado.
Medidas: 47 x 65; 63 x 82 cm (marco).
En este lienzo se representa un tema histórico, una violenta batalla en un escenario natural dominado por un profesor paisaje, movido, que determina una iluminación de brillos y medias sombras. La acción se concentra en el primer plano, donde varios caballeros a pie y a caballo luchan con violencia, captados en complicados escorzos bien resueltos por el pintor. Más allá la narración se vuelve confusa, los personajes difuminados por efecto de la distancia, lográndose así una convincente impresión atmosférica. A través de su pincelada, la obra expresa a la, un estilo dinámico, teatral, narrativo y expresivo. Así, vemos una escena aparentemente caótica, aunque rigurosamente estudiada, que refleja con naturalismo el fragor de la lucha, la violencia del enfrentamiento, una violencia que se refleja también en el propio cromatismo, cálido y encendido.
Además la temática es alusiva a un hecho histórico, que fue un recurso muy común temáticamente durante esta época. Las incursiones historicistas en un primer momento se inspiraban en escenas de la historia cristiana, escenas de la mitología o de la antigüedad clásica, sin embargo en este caso la escena esta captada desde un punto de vista realista a pesar de la pincelada, el autor ha concebido la obra como si de un elemento documental se tratase, presentándose a sí mismo como un testigo de los acontecimientos. La pintura de historia se consideró tradicionalmente como el género más importante. Esta preeminencia se explicaba debido a un concepto determinado de que el arte tenía que proponer ejemplos nobles y verosímiles. Por ello se defendía la superioridad de aquellas obras artísticas en las que lo narrado se consideraba elevado o noble.
Por sus características estilísticas, este lienzo se puede relacionar con las directrices artísticas de Juan de Toledo, pintor barroco español al que se le han atribuido gran número de escenas de batallas, siempre próximas a la pintura flamenca. La obra que nos ocupa puede relacionarse con la heroica actuación de los españoles que defendieron Viena del asedio turco de 1529. Este tipo de escenas de batallas tuvieron un amplio desarrollo, provocado por la temática, que no solamente ensalzaba las victorias de aquellos que habían participado en la contienda. Sino que más allá de este rasgo testimonial, dichas pinturas reflejaban con su tema, escenas de carácter histórico. Un género que era ampliamente valorado, siendo considera el mejor de la historia del arte, por ensalzar las virtudes y el espíritu noble de los actos.