Escuela andaluza; siglo XVIII.
“La coronación de la Virgen”.
Óleo sobre lienzo.
Medidas: 62 x 60 cm; 72 x 70 cm (marco).
Esta obra sigue una composición en forma de triángulo invertido, con las tres figuras del mismo tamaño, acompañadas por ángeles niños, con la corona como centro de atención, sobrevolada por el Espíritu Santo en forma de paloma, captada en escorzo y de frente. Esta composición triangular invertida, con las figuras de Jesús a la izquierda, María y la paloma en el centro y Dios Padre a la derecha fue ya utilizada en los siglos XVI y XVII por diversos pintores en España, entre ellos El Greco (h. 1592, Museo del Prado) y Velázquez (1641-44, ídem). De hecho, Velázquez utiliza también un recurso visual que refuerza la idea de la unidad de la Trinidad, y que vemos también aquí: Jesús y Dios padre lucen ropas idénticas. El Greco, en cambio, los coloca como figura especular uno del otro, dado que ambos portan el mismo cetro colocado del mismo modo, tal y como aquí ocurre. No obstante, María aparece aquí arrodillada en posición orante, siguiendo modelos más antiguos, del pleno siglo XVI, lo que nos habla de la diversidad de fuentes propia de la escuela española del siglo XVIII.