y volver al lote.
28 Oct 2024 18:01
Escuela flamenca; siglo XVII.
“Resurrección”.
Óleo sobre lienzo. Reentelado.
Firmado en el ángulo inferior derecho.
Medidas: 59 x 44,5 cm; 67,5 x 53 cm (marco).
La presente obra muestra un fondo indeterminado, ayudando así al espectador a fijar su atención en las figuras. En el centro de la pintura se presenta el sepulcro abierto y sobre él la figura resplandeciente de Cristo resucitado. Es el sepulcro, ubicado en la zona terreanal, el que se encuentra rodeado por una serie de soldados, que aparecen mirando a Jesús, girando su rostro hacía el cielo y huyendo despavoridos aterrados por la situación. La figura de Jesús se muestra inscrita en un rompimiento de Gloria, prácticamente desnuda (salvo por el paño que la cubre parcialmente y ondea al viento, aportando movimiento y una clara sensación de algo incorpóreo o un viento que agita a la figura), bendiciendo con una mano y sosteniendo un estandarte con una cruz.
La escuela flamenca se caracterizó por la gran influencia de los primitivos flamencos, que pervivió en durante mucho tiempo, debido en gran parte a los lazos políticos y culturales entre ambos países. La pintura flamenca era, en el siglo XV, la más avanzada de Europa, e influyó en todas las escuelas nacionales, incluyendo a la italiana. Se consideraba un arte de enorme refinamiento, con obras realizadas y tratadas como joyas. También se debía esta consideración a los riquísimos materiales empleados en su ejecución, así como los montajes de las tablas que, como aquí vemos, eran de una gran riqueza. Los rasgos de la escuela flamenca son cercanos a los de la pintura flamenca, empezando por la máxima preocupación de los pintores de Flandes, la búsqueda de la realidad por encima de todo. En relación con este anhelo, se presta una enorme atención a las calidades de los objetos, así como a los más mínimos detalles, dotados además frecuentemente de una carga simbólica. La iconografía sigue siendo principalmente religiosa, y en las escenas predominará un dibujo correcto y preciso, muy minucioso. Del mismo modo, tratan de plasmar una iluminación lo más verídica posible, ya sea artificial o natural, siempre modelando las carnaciones y produciendo claroscuros en mayor o menor grado.