ÉRIC DU BELLAY (Chatenay Malabry, Francia, 1980)
“Hommage à Blow up de Michelangelo Antonioni”, 2020.
Impresión digital en papel Hahnemühle. Ejemplar 1/10. Edición limitada.
Adjunta certificado de autenticidad.
Firmada, titulada y justificada al dorso.
Medidas: 50 x 33,5 cm; 53 x 36,3 cm (marco).
El propio artista describe esta obra de la siguiente manera “Blow-Up (1966) de Michelangelo Antonioni fue una de las primeras películas de autor, una obra de arte pura, que tuve la oportunidad de ver. Era muy joven para entenderla en su totalidad, pero sus imágenes me impactaron profundamente y se grabaron en mi memoria para siempre. Así comenzó mi camino en la fotografía: quería capturar lo que me conmovía a mi alrededor, detener en imágenes esos fragmentos de mundo. Con el tiempo, descubrí el poder del cine, cuando me encontré por primera vez con una cámara de 8 mm. A los cuarenta años regresé a la fotografía con el proyecto Corps Vibrants en París, donde cada sesión fue una exploración y un pacto de confianza absoluta con mis modelos. Esta sesión en particular fue con una pareja, Léa y Thibaut: ella, bailarina y actriz; él, músico. Se entregaron sin reservas. Esta escena, en concreto, me conmueve. Es atrevida. La imagen muestra al hombre vestido, aparentemente dominante sobre la mujer, desnuda. Sin embargo, para mí representa algo distinto: puro amor y entrega. En toda relación hay una sutil lucha de poder, y esta puede invertirse en cualquier momento”.
Éric du Bellay se inició en la fotografía a los 15 años. Desvelaba sus propias fotos en blanco y negro. Desde el principio, su obra se centró en los rostros y en los cuerpos, como si quisiera conservar el rastro de los vivientes. Dejó la fotografía para emprender una carrera como cineasta. Realizó seis cortometrajes en Francia e Islandia, y su primer largometraje, Menina Casilda, se rodó en Madrid en 2021. Volvió a la fotografía en 2019 con su proyecto Corps Vibrants, desnudos realizados en estudio en París, seguido de su segundo proyecto, Libertad, iniciado en Madrid en 2021 como respuesta a las restricciones de la Pandemia. Influido por las obras de Marina Abramovic, Ren Hang, y Ryan McGinley, explora las representaciones de los cuerpos desnudos en movimiento.