Círculo de ANDREA MANTEGNA (Italia, h. 1431 – 1506); Mantua, siglo XVI.
“Virgen con Niño entronizada tras santos”.
Relieve en plata sobredorada.
Obra publicada en PAX TIBI, Mostra Paci litugiche XVI- XVIII, sec. Gaeta- Museo, Diocesano, pág 47. Lam. 36.
Medidas: 14 x 10, 8 cm.
Relieve realizado en plata sobredorada en el que se representa a la Virgen con el Niño entronizados entre santos. Con un hábil juego de perspectiva, la Virgen sentada en un trono queda en segundo plano frente a los cuatro santos del primer plano. A la izquierda, parece reconocerse a San Vitale de Verona, cubierto con la espléndida armadura romana. Su mano derecha descansa sobre el yelmo con cimera, también se ve el escudo y sobre él la espada. Detrás de él está el obispo Nicolás, que con la mano izquierda ofrece a la Virgen las bolas de oro para las tres doncellas que iban a casarse. Al otro lado hay un desnudo bien modelado que muestra las perforaciones de flechas en la espalda: es San Sebastián todavía con los brazos atados a la espalda, y detrás San Antonio Abad con báculo y el tradicional cochinillo. La Virgen viste una rica túnica ajustada. Un manto envuelve sus rodillas, de las que parece escurrirse el Niño Jesús, que tal vez quiere ir hacia San Juan, que está arrodillado cerca de los pies de la Virgen. En el escalón del pedestal del asiento de la Virgen hay dos cupidos con dos gallos, mientras que en el centro del pedestal se representa un sacrificio pagano: un toro es empujado hacia el altar. Detrás de la Madonna, subdividido en dos compartimentos horizontales, se encuentra el fondo con minuciosos bajorrelieves de inspiración renacentista derivados del estuco del arte romano.
Andrea Mantenga fue uno de los más destacados artistas del Quattrocento italiano, autor de obras clave del renacimiento como su “Lamentación sobre Cristo muerto” (1457-1501). Centrado en el estudio de las proporciones humanas, jugó un importante papel para el desarrollo del arte italiano de principios del XVI. Produjo asimismo numerosos grabados, medio apropiado para expresar su incisivo dibujo. Actualmente está representado en las más destacadas pinacotecas de todo el mundo, entre ellas el Louvre, el Hermitage y la Nacional Gallery de Londres.