JOSEP CLARÀ I AYATS (Olot, Girona, 1878 – Barcelona, 1958).
“Desnudo femenino”.
Escultura en terracota.
Firmada.
Medidas: 21 x 19 x 15 cm.
Josep Clarà inicia su formación en la Escuela de Dibujo de Olot, con Josep Berga i Boix, y más tarde estudiará escultura en la Escuela de Bellas Artes de Toulouse, Francia. Finalizados sus estudios, marcha a París en 1890, y allí trabajará en el taller de Louis Barrias y conocerá a Maillol, Bourdelle y Rodin. De hecho, los consejos de este último le ayudaron a superar las influencias modernistas de sus primeras obras. En 1907 presentó en el Salón de los Artistas Franceses la obra “Tormento”, obra que denota una influencia rodiniana que en su mármol “Crepúsculo” (1913, Museo de Santiago de Chile), cuyo modelo de escayola presentó en el Salón de la Société Nationale de 1908, se diluye en favor de una mayor claridad y serenidad. El año siguiente presentará la que será la primera de sus diosas, obra que finalmente representó el definitivo reconocimiento oficial de su talento. Trabajador infatigable, recibió diversos encargos de monumentos, como “Serenidad sobre las ruinas de la vida” (cementerio de San Isidro, Madrid) y “Monumento a los voluntarios catalanes” (parque de la Ciutadella, Barcelona). Con la maqueta de este último obtuvo el gran premio en París en 1925. A finales de ese mismo año fue nombrado miembro de la Academia de Bellas Artes de San Fernando de Madrid. Clarà realizó también cabezas y retratos, donde mostró un lenguaje condensado y vivo. En 1928 creó “Reposo” (MACBA), que le valió la medalla de honor de la Exposición Internacional de Barcelona (1929), y en 1934 obtuvo el premio Damià Campeny. En 1936 crearía una de sus mejores obras, por la síntesis de simplicidad, luz y serenidad: “Pujanza”. Es autor asimismo del “Monumento a los caídos” (1952) de Barcelona). Con el desnudo “Pomona” (Museo de La Habana) obtuvo el gran premio de la Bienal Hispanoamericana de 1954. En 1946 realizó un “San Benito” (Montserrat) que le orientó hacia el estudio de la figura sentada. Así, sus últimas obras serán principalmente maternidades sentadas y figuras tumbadas. En 1969 fue inaugurado en Barcelona el museo que lleva su nombre, donde se conserva una gran parte de su obra. También está presente en el Museo Comarcal de la Garrotxa en Olot y en el Nacional de Arte de Cataluña, entre otros.