SALVADOR DALÍ I DOMÉNECH (Figueras, Gerona, 1904 – 1989).
“Femme en flammes”, 1981.
Bronce. Ejemplar E.A 20/35,
Adjunta certificado de autenticidad y documentación.
Presenta sello de la fundición.
Medidas: 84 x 41 x 24 cm.
La concepción e inspiración de esta obra parte de la obra titulada "La jirafa en llamas" (Museo de Arte de Basilea), pero no se limita a ser una versión escultórica de su pintura de 1937. El imponente cuerpo femenino se curva a la altura del torso doblándose hacia atrás y cubriéndose los ojos con la mano derecha, extremando el gesto de desorientación y pérdida de la mujer con cajones del cuadro de 1937. Confluyen en la estatua los elementos del fuego y los cajones como símbolos premonitorios y psicológicos. La llama aquí no sale de una jirafa sino que repta como crestas de dragón por una pierna torneada, por cuya parte frontal se suceden los cajones del "guardarropa antropomórfico", como lo denominó el propio Dalí. Este motivo ya estuvo presente en la escultura de 1936 "Venus de Milo con cajas". "Sólo el psicoanálisis puede abrir esos cajones secretos", decía Dalí siguiendo a Freud, quien había usado la metáfora de la cajonera para hablar del inconsciente. En el cuadro del Museo de Basilea el fuego se vinculó a la guerra civil española y a la premonición de la Segunda Guerra Mundial. En esta pieza monumental de 1980, en cambio, cabe vincularlo con el erotismo y la pasión insatisfecha, en relación a los problemas confesados por el artista de su impotencia sexual. Asimismo, las muletas (otro puntal básico del imaginario daliniano) que sostienen la espalda de la musa sugieren sentidos ambivalentes, pues son anclajes frágiles con la realidad y al mismo tiempo formas de acceder al subconsciente. En cuanto a la técnica, el bronce presenta un acabado de gran calidad, apreciable en el modelado y las texturas. El vestido se adhiere al cuerpo emulando la técnica griega de los paños mojados, dotando de sensualidad las curvas y de poder enigmático a la alegoría daliniana.
Pintor y escultor, Salvador Dalí fue uno de los máximos exponentes del movimiento surrealista. Su trabajo influyó enormemente en el rumbo del surrealismo durante los años veinte y treinta, siendo aclamado como creador del método paranoico-crítico, esencial combinación de lo real con lo imaginario. La mayor parte de su producción está reunida en el Teatro-Museo Dalí de Figueras, seguida por la colección del Salvador Dalí Museum de St. Petersbug (Florida), el Reina Sofía de Madrid, la Salvador Dalí Gallery de Pacific Palisades (California), el Espace Dalí de Montmartre (París) o el Dalí Universe de Londres.