ANTOINE-LOUIS BARYE (1795 -1875).
“Teseo combatiendo el centauro Bienor”, tercer tercio del siglo XIX.
Escultura en bronce patinado.
Firmada.
Con sello de fundición: F. BARBEDIENNE.
Medidas: 75 x 74 x 29 cm.
La obra licitada es una segunda versión de la lucha de Teseo, esta vez con el centauro Bienor, producida por Barbedienne. La escena retrata un violento incidente ocurrido durante la boda de Pirítoo con Hipodamia. Los centauros, invitados a la celebración, se embriagaron e intentaron agredir sexualmente a la novia y sus acompañantes, desatando un brutal enfrentamiento; l pasaje fue narrado por Ovidio en el Libro XII de las Metamorfosis.
La creación de la pieza se desarrolló en dos etapas importantes: la primera versión data de 1840; nueve años después, en 1849, el artista elaboró la definitiva, respondiendo a un encargo del gobierno. Esta fue posteriormente exhibida ante el público en el Salón de 1850. El grupo, que recuerda al anteriormente realizada por Antonio Canova, hoy expuesto en Viena, fue editado póstumamente por Barbedienne en cuatro reducciones.
Destaca por el violento escorzo que domina la escena, donde contrasta la calma del héroe ateniense con el terror plasmado en el rostro del centauro. Teseo agarra por el cuello a Bienor, embriagado por el vino, que parece no tenerse en pie y sucumbe a las acometidas de su enemigo, el cual eleva el brazo para propinarle el golpe final.
En el panorama artístico del siglo XIX, Antoine-Louis Barye se erigió como una figura prominente, destacándose por su excepcional talento en la escultura animalista. Su dominio en la representación de animales lo convirtió en uno de los escultores más solicitados de su época. Aunque es reconocido por sus representaciones de animales, su obra abarcó una gama más amplia de temas, como la mitología.
Inició su formación junto a su padre, orfebre, y posteriormente la amplió con los maestros François Joseph Bosio y Antoine-Jean Gros, en la Escuela Nacional Superior de Bellas Artes de París, donde ingresó en 1818. Tuvo su propia fundición, colaboró con Viollet-le-Duc en un proyecto encargado por Napoleón III y fue maestro de Auguste Rodin.
Un ejemplo notable de su incursión en temas mitológicos es su interpretación del mito de Teseo, al cual recurrió en dos ocasiones distintas. Una de estas obras representa el famoso enfrentamiento entre Teseo, hijo de Egeo, y el Minotauro en el laberinto de Creta. En 1843, presentó esta obra en el Salón del Louvre; sin embargo, la obra fue rechazada por el jurado.