M. SECONDO (siglos XIX – XX).
“Dama con perro”, ca. 1920.
Escultura en bronce plateado sobre peana de mármol.
Firmada.
Medidas: 15 x 52 x 25 cm (bronce); 20 x 60 cm. (base).
Elegante grupo escultórico en bronce plateado que representa a una joven con un labrador.
El Art Déco se desarrolla a partir de los años veinte, si bien gozó de una larga vida gracias a la popularidad que le aportó el cine, que difundió su estética hasta incluso los años cuarenta, abarcando casi por completo el periodo de entreguerras. La estética Déco es, en un sentido, una amalgama de muchos estilos y movimientos diversos del temprano siglo XX y, a diferencia del Art Nouveau, recibió influencias de las primeras vanguardias, principalmente del constructivismo, el cubismo, el futurismo e incluso el racionalismo de la Bauhaus. Los progresivos descubrimientos arqueológicos en el Antiguo Egipto marcaron también su impronta en ciertas líneas duras y en la solidez de las formas del Art Déco. Asimismo, como estilo de la edad de la máquina utilizó las innovaciones de los tiempos para sus formas: las líneas aerodinámicas producto de la aviación moderna, la iluminación eléctrica, el revestimiento marino, los rascacielos, etc. Estas influencias se reflejan en diseños de formas fraccionadas, simétricas y claramente geometrizadas. No obstante, se trata de un arte fundamentalmente clásico, si bien aborda el clasicismo desde una óptica nueva, basada en la arqueología y en los principios estéticos elementales. Así, las formas del Art Déco son idealizadas, equilibradas y proporcionadas, pero a la vez sintéticas y esenciales, alejadas de la directa inspiración en la naturaleza de finales del siglo XIX.