ENRIC CASANOVAS ROY (Barcelona, 1882 – 1948).
“Figura femenina”.
Bronce patinado. Base de mármol.
Firmado en la base (lateral derecho).
Medidas: 125 x 37 x 27 cm (escultura); 7 x 31 x 31 cm (base de mármol).
La figura femenina, de canon clásico y mediterráneo, adopta un leve contrapposto, lo que marca la sutil silueta de sus miembros torneados. Por la nobleza que emana de su posado y de la armonía de sus rasgos, parece evocar una diosa grecorromana.
El escultor Enric Casanovas fue uno de los principales representantes del “noucentisme” catalán, y su obra se caracteriza por una monumentalidad inspirada en la escultura griega arcaica. Inició su formación como discípulo de Josep Llimona (1896), para a continuación ingresar en la Escuela de La Lonja de Barcelona (1900). Realiza en 1900 su primer viaje a París, y a su regreso mostró su obra en Els Quatre Gats (1903). Su primera participación en una muestra fue en la Exposición Nacional de Bellas Artes de Zaragoza, en 1898. Entre 1904 y 1913 vive entre París y Barcelona, en contacto con Picasso, Maillol y Gargallo, entre otros artistas. A su regreso a la ciudad condal abre un taller, por el que pasaron destacadas figuras como Rebull, Fenosa, Granyer o Viladomat. En 1910 participó en la primera exposición de “Les Arts i els Artistes”, asociación de la que llegará a ser presidente. Ese mismo año expuso en el Faianç Català, y poco después viaja a Londres y Bélgica (1912). Por estos años se integró en el equipo de la Escuela de Decoración que dirigía Joaquín Torres-García (1914). En 1920 obtiene una sala especial en la Exposición de Bellas Artes, y en 1922 participa en la Exposición de Artistas Catalanes de Ámsterdam. Cinco años más tarde muestra su obra en Italia, y en 1929 obtiene la medalla de oro de la Exposición Universal de Barcelona. En 1932 ingresa en la Academia de Bellas Artes de San Jorge, y en 1935 obtiene el premio Campeny de la Generalitat de Catalunya. Tras ejercer desde 1936 como director del Museo de Tossa, entre 1939 y 1943 vive exiliado en Francia, aunque sus últimos años los pasó finalmente en su Barcelona natal. Casanovas realizó tanto obras para particulares como encargos públicos, ejemplo de lo cual es su “Figura femenina” de la Plaza Cataluña de Barcelona. Actualmente se conserva su obra en el Museo Nacional de Arte de Cataluña, el Museo Municipal de Tossa de Mar, el Museo de Arte Jaume Morera de Lleida, el Museo de Esculturas Luis Perlotti de Buenos Aires y en el MACBA.