MIGUEL MILÁ (Barcelona, 1931-Bilbao, 2024) para Polinax.
Lámpara de techo “Max Bill”, 1964.
Madera, material plástico y latón.
Presenta marcas de uso y desgaste.
Medidas: 20 x 23,5 x 23,5 cm.
Lámpara de suspensión diseñada en 1964 por Miguel Milá y nombrada así como homenaje al diseñador Max Bill, quien formó parte del jurado que otorgó el premio Delta de Oro. Este modelo de lámparas sería fabricado en 1964 y 1965 por Tramo. Desde 1965 hasta 1982, Polinax (empresa del hermano de Miguel Milá, Leopoldo) tomó el relevo. Presenta una doble pantalla bicolor de metacrilato inyectado, color cereza en el exterior y blanco en el interior. Una elegante pieza une el portalámparas con la pantalla.
Cuando en España nadie sabía qué era ser diseñador, a pesar de que, como ahora ya todos sabemos, cualquier objeto está diseñado (con o sin firma detrás), Miguel Milá ya lo era, es decir, intentaba hacer que los objetos de uso cotidiano nos hicieran la vida más fácil y más feliz, que son las bases de toda innovación. Innovar es poner en marcha una cadena imaginativa y productiva: imaginar nuevas formas y nuevos usos y hacer posible, a través de la artesanía y la industria, que eso llegue a buen puerto, eligiendo los materiales y las técnicas adecuadas. Él lo hizo desde el principio, por eso es un maestro. Muchas de sus piezas nacieron predestinadas a ser icónicas, como las lámparas Cesta (1962), TMM y TMC (1961).