Después de JEAN-MICHEL BASQUIAT (Nueva York, EEUU, 1960 - 1988).
“Gold Dinousar”, 2012.
Porcelana de Limoges. Editado por Ligne Blanche, París.
Conserva caja original.
Medidas: 21,5 x 2 cm; 22,5 x 22,5 cm (caja).
Plato de porcelana de Limoges editado por Ligne Blanche (Paris) en colaboración con “The Estate of Jean-Michel Basquiat”, basada en su pintura Pez Dispenser (1984). Evocando la alegría infantil de los caramelos Pez, esta obra alude a la cultura consumista de los años 80, e ilustra la figura de un dinosaurio ataviado con la corona de tres puntas, un símbolo que Basquiat utilizaba a menudo para transmitir fuerza y poder espiritual.
Artista prolífico, Jean-Michel Basquiat empezó a dibujar a los tres años, inspirándose de la cultura urbana con los coches, taxis y autobuses que recorrían las calles, así como también a través de la televisión y los cómics. Plasmó esta mirada por su entorno en sus cuadros durante toda su vida, especialmente en forma de vibrantes líneas, trazos intensos, figuras recortadas en negro, expresiones faciales llevadas al límite, etc. Durante los primeros años de la década de los ochenta empezó a despuntar como artista, en un momento en que predomina el reinado del arte conceptual y el minimalismo estético en todas sus formas. La presencia de la cultura urbana y el grafiti se mezclan con la tradición figurativa europea. Su primera exposición en solitario tuvo lugar en 1982, en la galería Annina Nosei del SoHo neoyorquino. Esto supuso el comienzo de una serie de muestras individuales y colectivas donde se aglutinó su obra con la de otros artistas coetáneos importantes, como Julian Schnabel o David Salle. En estos años realiza más de doscientos lienzos con retratos de personajes influyentes pertenecientes a dicha cultura, entre los que destacan Muhammad Ali o Dizzy Gillespie. Es en este momento en el que sus obras empiezan a ser muy cotizadas, y lógicamente su presencia es demandada en los más exclusivos eventos de la época. Cabe destacar su estrecha relación con Andy Warhol, quien influye poderosamente en el trabajo de ambos. La intensidad con la que Jean-Michel Basquiat creaba tenía un exacto reflejo en su vida.