Jarrón historicista. Nápoles, c. 1880
Loza esmaltada o mayólica con escenas en "istoriato"
Firmado: "Gaetano Battaglia"
Presenta alguna falta y restauraciones
Medidas: 156 x 60 x 50 cm.
Este gran jarrón debe incluirse en la producción de Gaetano Battaglia (activo entre 1850 y hacia 1885), que ya trabajaba en la fábrica Mosca (G. Tortolani, La fabbrica napoletana dei fratelli Mosca: il Bello e l'Utile in Faenza, XCIII, 2007).
De una calidad verdaderamente sostenida, esta cerámica colosal parece cercana a las obras de otros ceramistas importantes de la época, como Minghetti en las últimas décadas del siglo XIX, sobre todo por su atención a los prototipos del siglo XVI (signo de un gusto compartido con otros hornos de la época, por ejemplo en Imola): baste pensar en el famoso servicio Borbón-Montpensier, que pasó por estas salas en 2008, o en la producción de grandes formatos, a menudo destinados a exposiciones internacionales de la época (M. G. Morganti, La fabbrica Minghetti, en La ceramica dell'Ottocento nel Veneto e in Emilia Romagna, Módena 1998, p. 219 passim): recordando, no obstante, que un cierto gigantismo en la producción cerámica de estos años era efectivamente una característica generalizada
El gran jarrón que se presenta queda sostenido sobre una peana de notable altura, ambas partes realizadas en mayólica italiana, esmaltadas a mano y ornadas mediante decoración "istoriato", escenas históricas, mitológicas,religiosas o de género surgidas con gran éxito durante el siglo XVI, cuya elaboración continúa en la actualidad en algunos talleres artesanales italianos. Concretamente, el gran jarrón de cuerpo campaniforme se encuentra decorado mediante escenas que aluden a la Antigüedad Clásica, continuando así la tipología de grandes jarrones efectuados en Urbino, al igual que las dos asas de formato escultórico que se alzan imponentes en sus laterales, representando seres híbridos, con bustos de humanos y rostros felinos.
Entre los principales centros de producción de mayólica historiada destacan Urbino y Casteldurante; sin embargo, hubo también numerosas factorías por todo el país, las más relevantes de las cuales fueron Faenza, Pesaro, Castelli, Deruta y Caffagiolo. Entre los motivos decorativos realizados durante todo el siglo XVI hasta las primeras décadas del siglo XVII, los grutescos se convertirán, gracias a las pinturas al fresco de la Logia del Vaticano de Rafael, en «rafaelescos» para contornar los medallones historiados de las decenas de jarras, de fuentes, de platos a menudo adornados con pequeñas esculturas de animales fantásticos y de cariátides de diversas formas.