Reloj de sobremesa de estilo Carlos X; Francia, segundo tercio del siglo XIX.
Bronce dorado y esfera de latón.
Posee suspensión Brocot.
Conserva péndulo y llave.
Firmado en la esfera.
Medidas: 61 x 32 x 18 cm.
Reloj de concepción escultórica de estilo Imperio que se dispone sobre una base cuadrada de aristas vivas con un elegante y sintético relieve vegetal en la zona frontal. La parte superior queda definida por la presencia de una figura en bulto redondo que representa a una joven dama desnuda que gira su rostro respecto a la figura del espectador. La dama apoya su brazo sobre una zona rocosa que sirve como base para enmarcar la esfera del reloj de acabado dorado y numeración romana en color negro.
Los relojes de bronce de sobremesa del siglo XIX fueron piezas clave en la decoración y el diseño de interiores, además de símbolos de estatus social y refinamiento. Elaborados con gran detalle y a menudo adornados con motivos artísticos, estos relojes no solo servían para medir el tiempo, sino que también reflejaban los avances técnicos y el gusto por la artesanía fina de la época. El bronce, un material duradero y estéticamente apreciado, permitía la creación de formas complejas y elegantes, integrando estilos como el neoclásico o el rococó, lo que los convertía en objetos altamente valorados en las residencias de la alta sociedad.