JUAN MUÑOZ (Madrid, 1953-Ibiza, 2001).
Sin título.
Tinta sobre montaje de papel.
Adjunta certificado expedido por la Galería Fernando Latorre (Zaragoza).
Presenta sello de exposición de Galería Fernando Latorre (Zaragoza).
Firmado en la zona inferior derecha.
Medidas: 31 x 29 cm; 37 x 37 cm (marco).
La arquitectura fue una constante en la obra de Juan Muñoz, en muchas ocasiones vinculados con la idea de umbral o de vano entre dos espacios. En este caso se puede apreciar como a través de estos interiores se percibe esa sensación de tránsito. De hecho, la obra guarda una gran relación estética y conceptual con dibujos como “An outpost of progress o “Raincoat Drawing”, que se pueden apreciar en el catalogo de la web del artista. A pesar de ser conocido por sus obras escultóricas, el dibujo como técnica de Juan Muñoz posee gran relevancia en el desarrollo de su carrera, como bien constató la muestra que le dedicó el centro Cetro Botín en colaboración con el Juan Muñoz Estate: “Juan Muñoz: Dibujos 1982 – 2000”, comisariada por Dieter Schwarz.
Juan Muñoz se inició en el mundo del arte, al ser expulsado de la escuela, fue entonces cuando empezó a recibir clases de un poeta que también era crítico de arte. En la década de 1970, se mudó a Inglaterra para estudiar en Croydon College y la Escuela Central de Arte y Diseño. Allí conoció a la escultora Cristina Iglesias, con quien se casó. En 1982 recibió una beca Fulbright y viajó a los Estados Unidos para estudiar en el Instituto Pratt en la ciudad de Nueva York. Su primera exposición fue en 1984 en la galería Fernando Vijande de Madrid. Desde entonces, sus obras se han expuesto a nivel internacional llegando a realizar muestras en diversos espacios de gran prestigio artístico como por ejemplo los museos Guggenheim en Bilbao y Nueva York, el Art Institute de Chicago, el Museo de Arte Contemporáneo en Los Ángeles, la Tate Modern de Londres, o el Museo Centro de Arte Reina Sofía, entre muchos otros. A principios de la década de 1990, Juan Muñoz comenzó a romper las reglas de la escultura tradicional al esculpir obras de manera "narrativa" que consistía en crear figuras más pequeñas que el tamaño natural, en un ambiente de interacción mutua. Las esculturas de Muñoz a menudo invitan al espectador a relacionarse con ellas, haciendo que el espectador se sienta como si se hubieran convertido discretamente en parte de la obra de arte. Sus figuras monocromáticas de color gris pizarra o cera, crean una especie de discreción debido a su falta de individualidad, pero esa ausencia de individualidad cuestiona al espectador, tal vez incluso tanto que incomoda al espectador. Además de la escultura, Muñoz se interesó por la creación de artes auditivas, creando algunas obras para la radio. En el año 2000, recibió el Premio Nacional de Bellas Artes de España, sobre el cual Muñoz dijo: "Creo que me compraré un reloj". Tras recibir dicho premio, Muñoz mostró su obra en la Sala de las Turbinas de la Tate Modern de Londres, con su obra Double Bind (Doble vínculo). Siendo así el primer artista español en conseguirlo. Hoy en día su obra se puede encontrar en importantes colecciones internacionales, entre las que destacan; el Museo ARTIUM de Vitoria, el Centro de Arte Dos de Mayo, la Colección Telefónica, la Fundación Ico, el Glenstone museum (USA), el Museo Guggenheim de Bilbao, el Museo Centro de Arte Reina sofia, el MACBA de Barcelona, el MOCA de los Angeles, el Rubell Museum Contemporary Arts Foundation y la Tate modern de Londres, entre muchos otros.