Poste funerario Aloalo; Mahafaly, Madagascar, siglo XX.
Madera con pátina gris.
Presenta desgaste originado por el paso del tiempo.
Medidas: 151 cm (altura).
Poste funerario tallado en madera que representa una figura femenina coronada por un cebú. Como en gran parte de Madagascar, los mahafaly entierran a sus muertos en tumbas. Históricamente, las tumbas de los miembros de la familia se situaban en zonas de bosques sagrados, lejos de las casas de los vivos, aunque debido a la deforestación y otros factores esto ya no siempre es así. Las tumbas suelen estar agrupadas y dispuestas según el rango y el papel de los miembros de la familia, siendo la del antepasado mayor la más al sur, la de sus descendientes al norte y la de las esposas y familiares solteros al oeste. Los funerales constan de varias ceremonias, y en cada una de ellas se sacrifican cebúes cuyos cráneos se colocan sobre la tumba. La primera ceremonia es de preparación para los acontecimientos siguientes y el cebú ombilahy sacrificado en esta ceremonia es especialmente importante porque la carne se comparte con todos los reunidos como gesto de unidad y amistad.
Los mahafaly también decoran sus tumbas con aloalo, altos postes de madera tallados con motivos geométricos y a veces rematados con cebú tallado u otras figuras significativas para el difunto. Estos postes pretenden indicar que una persona ha muerto y alcanzado el estatus de «antepasado» (razana), que sirven de intermediarios entre los vivos y Dios.