Amón; Egipto, Baja época, 664-332 d. C,
Bronce.
Posee peana hecha por Kichizo Inagaki.
Peana firmada con sello.
Medidas: 18 x 5 x 4 cm; 3 x 13 x 5 cm (peana).
Estatuilla votiva que representa al dios Amón, de pie en actitud de caminar con la pierna izquierda adelantada. Su torso desnudo lleva el taparrabos chendjit, la barba postiza trenzada y el collar ousekh. La pluma de avestruz le falta en parte, ya que en origen debe llevar un cetro. Amón era un dios dinástico, señor de Karnak en Tebas y de numerosas otros santuarios. De todos los dioses del panteón egipcio, Amón era sin duda el que adquirió un renombre sin parangón cuando consiguió el altamente prestigioso dios dinástico. Fue a partir del Reino Medio, bajo el reinado de Amenemhet I fundador de la XII Dinastía, que Amón se convirtió en el rey de los dioses y, por tanto, en «el dios de los dioses». Amón, rey de los dioses, señor de los tronos de la Tierra Doble». Con Mut, su diosa, y Khonsu, su hijo, formaron la Tríada Tebana, una de las más la más teología egipcia. Al este de su gran templo de Karnak, tenía tenía un santuario de «Amón-que-escucha-las-oraciones» donde respondía respondía oráculos, como atestiguan las «estelas de orejas». Orejas que le dirigían sus seguidores.