y volver al lote.
30 Oct 2024 17:06
Caballo; China, dinastía Wei, 386-584 d. C.
Terracota policromada.
Adjunta estudio de termoluminiscencia.
Presenta desgastes y adhesiones matéricas.
Medidas: 31 x 20 x 17 cm.
Figura realizada en bulto redondo situada de pie sobre sus cuatro patas situadas en una pequeña base. El modelado del caballo presenta una anatomía de carácter realista y detallista que se puede apreciar en el rostro y la vestimenta de paseo con la que se encuentra ataviado. Destaca su porte estilizado, y su postura que otorga una gran expresividad a la pieza debido a la apertura de las patas delanteras que denotan un movimiento y por lo tanto la realización de una acción. Este tipo de piezas solían formar parte del ajuar funerario de la dinastía Wei, ya que el caballo era un símbolo de rango y de pertenencia a la alta esfera en la jerarquía social. La pieza conserva todavía restos de la policromía original aplicada como engobe sobre la pieza de arcilla y no con vidriado. Visible especialmente, la policromía, en la vestimenta de paseo y en algunos arreos del caballo.
La dinastía Wei dominó el norte de China en el periodo de las Dinastías Meridionales y Septentrionales (420-589), siendo la primera de las dinastías del norte. Este periodo sucedió a la caída de la dinastía Jin, y fue un momento en el cual el sur y el norte de China tuvieron gobiernos diferentes. Aunque el norte estaba ya desde el 386 en manos de la dinastía Wei, la fecha de comienzo de este periodo histórico se sitúa de manera convencional en el año 420, cuando la dinastía Jin refugiada llegó a su fin, siendo sustituida por la primera de las dinastías meridionales, la Liu-Song. La cerámica del periodo de las Dinastías Meridionales y Septentrionales supone una continuación de la del periodo de los Tres Reinos y las Seis Dinastías, momento en que se produjo un importante desarrollo del arte de la cerámica partiendo de la tradición del periodo Han. Así, se siguen realizando principalmente figurillas funerarias decoradas con engobes, pero las técnicas se perfeccionan de manera destacada, al igual que las pastas, los engobes, etc.